Con la lógica neoliberal que nos hizo creer que muchas ganancias para las empresas significaba beneficios para la población ─¿se acuerdan de la teoría del derrame?─, el negocio inmobiliario avanza y engulle todo lo que puede ─en la ciudad junto a la piqueta macrista─ para construír la muerte del PATRIMONIO...
- «Cambios, nuevos desafíos. Aggiornarse para enfrentar el año recién estrenado. Momento ideal para incorporar ideas renovadas en los diferentes ámbitos. ¿Cuáles serán las que conciernen al sector inmobiliario? Más que en la ciudad -y en determinadas zonas que buscan dejar atrás cierto aislamiento con relación a otros barrios pujantes y con muchos edificios nuevos en esas áreas y servicios para satisfacer a los nuevos residentes- se conocen proyectos interesantes en zonas del interior de la provincia», opina Adriana Anzillotti en LA NACION.
«... El segmento de las urbanizaciones suma más proyectos, pero en la mayoría de los casos se trata también de propuestas muy bien meditadas para un público que no duda en mudarse a las afueras. O para satisfacer la misma migración entre los emprendimientos y en las distintas zonas. Y que como sucede en la ciudad, la gente apuesta al cambio, por una casa más amplia o para achicarse o bien un condominio cerca de áreas con servicios y toda la infraestructura necesaria para vivir con confort y todo a mano...»
Algunos lectores de LA NACION esperan emprendimientos inmobiliarios como SOLARES DE SANTA MARÍA, un negociado revulsivo en plena Reserva Ecológica.
Estos ciudadanos insolidarios consumen todo emprendimiento que no se ajuste a derecho y pretenda desconocer el estatus legal vigente; en especial aquellos que reducen el patrimonio público para ponerlo a disposición de privados.
Por ejemplo, el proyecto de ratificación del convenio suscripto entre el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la empresa Solares de Santa María S.A, emprendimiento inmobiliario cuestionable per se, ya categorizado como de Alto Impacto Ambiental; donde se pretende legitimar el uso del canal de la Reserva Ecológica Costanera Sur –Declarado sitio Ramsar– para usufructo de dicha empresa, traspasando sus límites y poniendo en peligro el ecosistema existente. Otros ciudadanos, perseverantes y memoriosos, bregamos por una ciudad para todos y todas, inclusiva y solidaria, aunque Mauricio Macri y sus funcionarios hagan todo lo posible por arruinarnos la vida.
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